viernes, 24 de junio de 2011

VINCULO ENTRE PADRINO O MADRINA Y SUS AHIJADOS Y SU BENDICION

Mi Padre
Echar la Bendición": Un Acto Supremo de Fe, Humildad y Amor.
Uno de los actos más puros y espiritualmente más decisivos en la relación ahijado-padrino, es el de "echar la bendición". Cuando un ahijado le pide a su padrino o madrina que "le eche la bendición" o cuando el sacerdote decide "echarle la bendición" a un ahijado o ahijada en una acción, empresa o gestión a realizar o para la vida; ahí va un profundo intercambio de espiritualidad entre el referido sacerdote y su ahijado.
En tal acción va toda una carga positiva que genera el sacerdote y todo lo que él o ella representa en función del que la solicita. Esta carga no sólo es la espiritualidad del funcionario religioso sino que, además, es vehículo de las energías positivas ancestrales que guían y protegen al sacerdote. Si la acción por la que se pide tan sublime acto, es pura y está encaminada al bien, entonces no hay dudas que el efecto será absolutamente reconfortante y positivo.
Hay tanto amor en tan sencilla ceremonia de fe, que en ese momento exquisito surge un fulgor, una irradiación de pureza emanada de los ancestros que vienen a bendecir al ahijado en su petición. Cuando un sacerdote bendice las acciones y la vida de un ahijado, esto significa que el Itá se está cumpliendo como lo indicaron los Oshas y Orishas que asistieron a la Ceremonia de Iniciación pues el sacerdote es el garante de tal cumplimiento, observador y guía de esta gran responsabilidad en la vida de su ahijado.


Este acto de fe, realizado con la mayor humildad, procura bienestar y regocijo en el binomio ahijado-padrino, pues ambos se benefician en su bregar por este plano tierra. De ahí que insistamos en mantener esta hermosísima tradición entre los creyentes de Osha-Ifá. Mientras más cerca tengamos a nuestros ancestros, es decir, a sus espiritualidades, más y mejor irradiados estaremos. Por otra parte es tan milagroso este acto de fe que una bendición profundamente sentida, de todo corazón hecha hasta de un menor alcanza su Padrino.
Cuál es el Rol de la Oyugbona en la Iniciación de Yoko Osha?

se debe respetar a tus padrino no por obligación si no porque al mostrarte este bello camino debes de ser agradecido porque te ha cuidado y te ha apoyado cuando lo has necesitado, como te decía
hay quienes cambian de padrino porque quieren ver si con lo que le dice uno y con lo que le dice otro pueden aprender mas de la santería, es decir entre mas padrinos tenga piensan que van a tener el conocimiento y los secretos de la Santería, sin embargo en ese proceso pueden perder lo mas por lo menos, pueden perder a un padrino bueno por un charlatán que seguramente los meterá en problemas.

Cuando a tu camino ha llegado un padrino que ama la Santería te ha sido otorgada una bendición porque será el quien te oriente, te escuche, te de consejos para que puedas ser mejor y cualquier cosa que el te aconseje será para tu bien, jamás te pedirá algo que atente contra persona alguna por ello debes valorar y dar gracias cuando sabes que tienes un padrino noble y honesto.
Un padrino es una persona que ha recorrido un camino muy largo al igual que muchas personas que estan leyendo este apartado, un padrino tambien tuvo una iniciacion, se le entregaron sus primeros collares, conocio la historia de la santeria, sus origenes y sus santos, se hizo su ceremonia de asentamiento de santo y continuo estudiando y aprendiendo hasta culminar con sus consagraciones teniendo en mente siempre honrar a sus santos y que en sus manos estara el bienestar de mucha gente que va a buscarlo en busca de consejo y ayuda, tambien aceptando la responsabilidad ante sus futuros ahijados, asi entonces un padrino es alguien que ama y respeta la santeria y que paso a paso llego a ser un buen santero y puede tener ahijados ya que cuenta con el conocimiento necesario
En principio, la Oyugbona resulta ser un iniciado de cualquier género-masculino o femenino- que tiene el consentimiento del Ángel de su Guarda para desempeñar está función. Es quien se responsabiliza como segundo-a padrino/madrina madrina de una persona que se va a iniciar en Osha-Ifá y tiene la responsabilidad de guiar el desarrollo religioso de esa persona bajo la orientación del padrino de Osha. Oyugbona es el santero-a que el padrino/madrina ha aceptado para que lo sustituya a él/ella cuando sea necesario en relación a un iniciado. Aquí se ve la figura venerable de compadre y comadre que nos llegó de la cultura española. Son personas por las que se siente respeto, admiración y confianza.
Oyugbona debe poseer la absoluta confianza del padrino y del futuro Iyawo que la aceptó para esta función.
Desde el punto de vista histórico, hubo destacadas casas de santo en Cuba que, para aproximarse a otras, escogían de Oyugbona a algunos de los santeros importantes de otras casas de santo, como un acto de reconocimiento, alianza y amistad.
Oyugbona sirve de guía del futuro Iyawo; es la persona con quien intima el neófito en sus desconocimientos, en sus dudas, en sus temores, en sus deseos, y se convierte en un facilitador del Iyawo ante el Padrino, la Madrina, el Oba, el Olúo y el resto de la comunidad religiosa, en cuanto a todas las situaciones o acciones que él/ella debe realizar para consumar su Iniciación y llevar a efecto su vida religiosa. Oyugbona tiene a su cargo preparar para las ceremonias de iniciación todas las Otá y el caracol de los santos del padrino y del ahijado, organiza todos los enseres en la habitación de forma práctica; es quien facilita al Oba la ejecución de sus diferentes desempeños en todas las posiciones rituales y ceremoniales del Igbodun. Oyugbona también es responsable de velar por la adecuada realización de las ofrendas a los Orishas dentro del Igbodun. Además es responsable, entre otras funciones, de la preparación y presentación de los Ashé a los Orishas.
Oyugbona atiende directamente al Iyawó en su alimentación. Es quien le da el desayuno ritual y se encarga de servirle los alimentos en los diferentes horarios del día, sobre la estera, que entre otras cosas, simboliza la mesa y la cama del Iyawó. Además se ocupa personalmente de la higiene del Igbodun y del propio Iyawó incluyendo la ropa que él/ella usa durante los siete días de la Iniciación.
Oyugbona tiene el deber de mantener al padrino/madrina al corriente de todas las inquietudes y preocupaciones del futuro iniciado.
Cuando los ritos y ceremonias de una iniciación se han realizado satisfactoriamente, se puede atribuir ese resultado, en gran medida, a la labor que desempeñó la Oyugbona y no es posible culminar satisfactoriamente las ceremonias y ritos de una iniciación con un desempeño negativo de la Oyugbona.
Por tal motivo sería ideal que la persona que se va a desempeñar como Oyugbona por primera vez tuviera conocimientos de Osha.
Sin embargo, lo que está ocurriendo con frecuencia que es que el iniciado que va a fungir como Oyugbona por primera vez, no tiene experiencias y tiene que ser guiado por uno de sus mayores, con amplios conocimientos sobre la función de Oyugbona en el Igbodun y las reglas de comportamiento dentro del mismo. Situación que limita la efectiva asistencia o atención de la Oyugbona al Iyawó en los días que dura la iniciación.
Por la importancia y responsabilidad que tiene la función de Oyugbona, es necesario que cada vez que se participe en los ritos de iniciación se preste la mayor atención a todo lo que está ocurriendo y tratar de saber el por qué de las cosas. Todos los conocimientos e informaciones que puedas adquirir te serán útiles en el desempeño como Oyugbona en algún momento de tu vida religiosa.

DEBERES Y DERECHOS DE AHIJADOS Y PADRINOS
Para los ahijados:
1. Cumplir a cabalidad los requerimientos y lineamientos que Ocha-Ifa exigen.
2. Mantener buena presencia en el vestir, tener buenas costumbres y trato afable y humilde con el prójimo en sus contactos religiosos.
3. Estar pendiente de tener buenas relaciones con su padrino dentro del respeto y consideraciones que la ética y la lógica religiosa establece.
4. Comunicar con tiempo, la celebración de su coronación, ofreciéndole al Angel de  la Guarda de su padrino o madrina: dos cocos, dos velas y un derecho - si no tiene posibilidades económicas, ofrecer un derecho simbólico con su presencia.
5. Asistir en las celebraciones y eventos que efectúen sus padrinos sin necesidad  de una previa invitación,entre ellas las fechas festivas de coronación  de los respectivos santos coronados por cada uno de ellos.
6. Socorrer y auxiliar a sus padrinos en casos de necesidad de estos. Estas ayudas  conllevan consultar a su padrino en ausencia determinando la obra u obras a realizar y en el caso que se requieran gastos monetarios, actuar de acuerdo a las circunstancias y posibilidades existentes.
7. Alertar a sus padrinos de traiciones y otras acechanzas que puedan cernirse  sobre ellos, así como comunicarles los consejos, enseñanzas que otras personas puedan brindarle con aparente buena fe.
8. Recibir exclusivamente las enseñanzas religiosas pertinentes que le ofrezca su Padrino, con la excepción que este señale algún otro religioso para su aprendizaje.
9. En caso de presentarse divergencias con el padrino que sean insalvables,  debe recurrir a su segundo padrino - el Oyubon u Oyubona- para que este último haga uso de sus responsabilidades como tal, por existir 
desavenencias y desacuerdos insalvables.
10. El ahijado podrá ser sometido a un CONSEJO DISCIPLINARIO, solo en casos de cuestiones muy graves, como son las ya señaladas anteriormente en este documento.
11. Siendo Yabo solo efectuar visitas a otros religiosos que no pertenezcan a su  familia de santo acompañada por su Oyubona en el caso de que sea simplemente santero y si es babalawo con la anuencia - permiso- de su Padrino.
12. Recordarle al padrino las obras pendientes por Itá, ya que por tener otros  ahijados y por estar pendiente a las múltiples ocupaciones de su sacerdocio, pueden ser olvidadas por él.
13. Siendo Yabo cumplir rigurosamente las normas que enmarcan el Yaborage, entre  otras la vestimenta y de actuaciones no acordes con su estatus.  Así como existen deberes y derechos por parte de los ahijados, también  existen derechos y deberes de los Padrinos y Madrinas con sus ahijados. Estos son:
1. La entrega al ahijado de los santos que recibiera en su coronación,  incluyendo sus caracoles y su libreta de Itá, siendo santero y como  Babalawo su ifa y las correspondientes instrucciones al respecto.
2. Velar por un normal desarrollo religioso de su ahijado, evitando lo mas  posible inmiscuirse en cuestiones muy personales del ahijado, en el caso de que fuere necesario hacerlo, tener un tacto respetuoso y discrecional de lo que se trate.
3. Propender a una enseñanza inspirada en una fuerte unidad religiosa en el seno familiar y con otras manifestaciones afines.
4. Cumplir con las celebraciones del aniversario del ahijado con su presencia, en  esta conmemoración y es el que funja como segundo padrino- el Oyubon u Oyubona- quien corre con la responsabilidad de darle coco a los
santos del ahijado o ahijada.
5. Mostrar con una actitud digna de un sacerdote condiciones de humildad,  devoción, desinterés económico, respeto, consideración, sacrificio y  ayuda, como el ejemplo a seguir por su ahijado.
6. Ayudar, socorrer, auxiliar al ahijado en caso de cualquier situación de  enfermedad, accidente o de otra índole que se le presente; efectuando  las consultas y obras pertinentes.
7. Realizar las obras pendientes señaladas en el Itá, al ahijado en tiempo y forma.
8. Proceder a realizar cuanta aclaración y duda tenga el ahijado y si dado el caso  resultare imposible al Padrino satisfacer la exigencia recurrir a instancias superiores que sean capaces de dar respuestas a las preguntas y dudas existentes.
9. Tratar a todos sus ahijados por igual con el mismo respeto, estima y  consideraciones dignas de la investidura sacerdotal que se tiene.
10. Los padrinos y madrinas deben evitar caer con sus ahijados y ahijadas en relaciones pasionales.
EL PRIMER Año (YABORAJE)
1. El iyawo debe vestir de blanco, salvo en ocasiones en que lo ameriten y con el permiso expreso del Orisha tutelar y de sus mayores. Dichos permisos pueden ser motivados por razón de oficio o profesión que ejerce el iyawo, que lo obliga a emplear indumentarias o vestimentas distintas a las contempladas en el iyaworaje.
2. No debe dar la mano.
3. No debe tomar nada directamente de la mano de otra persona.
4. No debe acudir a lugares concurridos tales como cines, fiestas, tiendas, estadios, espectáculos, centros comerciales, etc.
5 No debe frecuentar enfermos en clínicas, hospitales, a menos que estos sean parientes directos.
6. No debe ir a velorios funerarias ni cementerios a menos que el difunto pertenezca a su parentela directa y/o casa religiosa.
7. No debe ingerir bebidas alcohólicas ni espirituosas.
8. No debe ingerir alimentos prohibidos en su Ita.
9. No debe mojarse con agua de lluvia ni exponerse al sol ni al sereno.
10. El iyawo deberá comer en el suelo sentado sobre la estera durante los tres primeros meses de iniciado.
11. El iyawo no va a ninguna actividad religiosa si no esta acompañado de sus mayores.
12. El iyawo no debe bailar, bailara solamente en fiesta religiosa, si y solo si esta presentado ante Aña.
13. Debe saludar a todos los Iworos mayores que el en todo momento con el moforibale (saludo) oportuno en el momento.
14. Por ningún motivo deberá emplear un lenguaje soez en su comunicación con las demás personas.
15. Cuando el iyawo sale a la calle, debe regresar antes de la caída del sol.
16. Nuca deberá visitar cárceles.
17. El iyawo no consulta a los oráculos durante el año deiyaworaje a menos que sea absolutamente necesario y bajo la anuencia de sus mayores
. 18. No puede bañarse en el mar, lagos, ríos o piscinas durante ese año.
19. El iyawo usara exclusivamente la cuchara, el plato y el vaso que se le asigno en su iniciación. Si sale de su casa debe llevarlo consigo. 
20. No puede mirarse al espejo durante los tres primeros meses del  iyaworaje.
21. Nunca dormirá desnudo.
22. No se tomara fotografías ni películas.
23. No empleara perfumes ni gomina, fijador gelatina para el cabello.
24. No deberá maquillarse ni pintarse las uñas.
25. deberá emplear zapatos cerrados, nunca sandalias ni zapatos sin talón.
26. Las prendas de ropas que usa el iyawo no pueden ser transparentes
o con brocados, no llevan flecos ni piedras o perlas de adorno.
27. La iyawo no usa blusas ni camisas sin mangas.
28. No debe usar joyas de ningún indole. Solo los atributos del santo.
29. Debe usar sus manillas y collares durante todo el año.
30. Debe usar medias e enaguas todo el año incluso para dormir.
31. La iyawo no usa pantalones.
32. Los Orishas de iyawo no se adornan ni se ponen de manifiesto durante el año de iyaworaje.
Durante el año de noviciado al iniciado no se le llamara por su nombre  sino se le dice “Iyawo” Solo después de cumplir su primer año de Osha,  este reanuda su vida normal, teniendo en cuenta los consejos de su Ita  que prevalecen para toda la vida. Obligaciones con sus Mayores;
• Llevar plato, cocos, vela y derecho el día de su cumpleaños de osha  y los días de cumpleaños de Osha de cada uno de sus mayores.
• Cuando realiza su primera y segunda ceremonia de envergadura,el  derecho le corresponde a su padrino y ogyubona respectivamente.
• Cada vez que va a realizar un Santo y su mayor esta presente, a este  le corresponde cortar la trenza respectiva.
• Cada vez que el olosha va a iniciar a una persona, debe de llevarla  al pie del Orisha tutelar de su mayor para darle cuenta de lo que vaya  a hacerse.
• Velar siempre por los mayores como lo hacemos con nuestros padres,  ayudándolos en todo lo que este a nuestro alcance.
• Ayudar en las actividades religiosas de sus mayores, también se presta ayuda a los hermanos de santos mayores o menores ya que estos  son parte de la familia religiosa. 
PATAKIN
El Camino de Obediencia.
Había una familia muy pobre que no tenía ni para comer y estaban pasando muchos  trabajos y miseria. Cuando a la mujer se le presenta la hora de dar a  luz, puesto que estaba embarazada, entonces el marido se empieza a lamentar que no tenía ni para desayunar y venir a nacer otro muchacho. Estando en estas lamentaciones se le presenta Ikú -la divinidad que representa la muerte- y le dice que si ellos querían que ella le bautizará a ese muchacho. Al principio no querían porque tenían mucho miedo, pero Ikú les dice que si ella bautizaba al muchacho, a ellos no les faltaría nada y al mismo tiempo ella se ocuparía de la educación
del muchacho y que sería la felicidad de todos.
pertenece." Y con la misma la muerte se retira.
Ante aquella exposición, los padres aceptan. Desde ese momento la familia empieza a  prosperar con la ayuda que le hacía Ikú. El muchacho empieza a crecer y  van pasando los años; cuando tuvo edad, va al colegio, después a la universidad y llega a salir doctor en medicina. Ya con el título, se le presenta a la Madrina y ella le dice: "Óyeme lo que te voy a decir. Toma esta flor, dondequiera que tú vayas y haya el enfermo que haya, tú no tienes más que tocarlo con esa flor que enseguida se pondrá bien, pero con la condición que cuando tú llegues y me veas a los pies del enfermo, no te metas a curarlo, pues ese me Va pasando el tiempo y el muchacho va adquiriendo fama y un día se enferma la hija  del Obá de aquella comarca y los médicos no encontraban el modo de  curarla. Entonces, uno de ellos dice que por qué no se llamaba al muchacho. Así lo hacen y llega el muchacho y ve a la enferma, pero allí también estaba su madrina que lo miraba de malos ojos. El muchacho se hace el desentendido, como si no la hubiera visto y cura a la princesa. Esto fue su gloria; estaba en la cúspide de su fama.
Entonces se le presenta la Madrina y le dice que por qué lo había desobedecido. Él le da una excusa y que no lo haría más.
La Madrina se retira. Pasa el tiempo. Después se enferma de nuevo la princesa y se  vuelve a presentar la Madrina, mirando con malos ojos a su ahijado; pero el muchacho, en primer lugar, estaba enamorado de la princesa y en segundo lugar, era su señora. Sin hacer caso de su madrina, toca a la princesa con la flor y se cura, pero acto continuo la madrina lleva al muchacho hasta la ventana y le dice:
"Tú ves ese  cielo estrellado, son vidas, las que brillan más son las que tienen  larga vida y las que brillan poco es que tienen poca vida". El muchacho le pregunta que cuál era la de él y ella le dice:
"Aquella que está allí". Era una que ya se estaba apagando. El se pone a implorar y  ella le dice que por su desobediencia e irrespetuosidad, se había  perdido, porque con ella no se podía porfiar y cae muerto.